ORACION DEL TABACO A LOS ESPIRITUS DEL NORTE, SUR, ESTE Y OESTE PARA DOMINAR Y AMARRAR

Los seres espirituales benévolos, generalmente son ángeles pero a veces pueden ser espíritus de ancestros u otros seres espirituales que han sido ascendidos. Estos ayudan a los humanos a lograr una relación adecuada con Dios, con otros seres espirituales o en las situaciones de la vida en que requieran su ayuda los humanos.

 

Los ángeles, por ejemplo, no solo actúan como reveladores de verdades divinas, sino que también son eficaces para ayudar a las personas a alcanzar la salvación o gracias especiales o favores. Su función principal es alabar y servir a Dios y hacer su voluntad, pero también la guardia y custodia de los humanos que Dios les encomendó.

Cuando hagas esta oración, además de ofrendar un tabaco, también puedes poner una vela de color rojo para hacerla más efectiva.

 

ORACIÓN

Ofrezco esta oración

a los espíritus benéficos

por el santo ángel de la guarda

de…………………

por el santo del día en que nació;

por los cuatro vientos, sendas y lugares:

en que se encuentre……………………

esté pendiente de mí, me quiera y no olvide.

Espíritu de la fuerza,

para que les des fuerza

a.........

que me quiera y venga donde yo estoy.

Espíritu de las ilusiones,

que las ilusiones que tenga............

me las pases a mí.

Espíritu del desespero para que el desespero

de………………………

sea por mí.

Espíritu del brillo y del dinero,

para que traiga dinero a mi casa

y lo ponga en mis manos.

Espíritus benéficos, aquí les entrego

cuerpo, alma y voluntad

de………………

no lo dejen comer, ni dormir, ni beber,

ni andar, ni trabajar sin el pensamiento puesto en mí,

que me llamo………………………….

Nota:

Al hacer esta oración concéntrese,

y encienda un cigarrillo o cigarro

que debe dejar depositado en un cenicero

mientras este se consume por si solo.

 

Los ángeles como extensiones funcionales de la voluntad divina, a veces intervienen en los asuntos humanos recompensando a los fieles y castigando a los injustos o salvando a los débiles, que necesitan ayuda, y destruyendo a los malvados, que persiguen injustamente a sus semejantes.

En el libro intertestamental de Tobías (un libro apócrifo u “escondido” que no es aceptado como canónico por judíos y protestantes), el arcángel Raphael ("Dios sana"), por ejemplo, ayuda al héroe Tobías, el hijo de Tobit, en un viaje y también le revela fórmulas mágicas para curar la ceguera de su padre y contrarrestar el poder del demonio Asmodeo.

A lo largo de la historia de las religiones, diferentes tipos y grados de creencias han existido en varios seres espirituales, poderes y principios que median entre el reino de lo sagrado o santo, es decir, el reino trascendente, y el reino profano del tiempo, el espacio y la causa y el efecto. Tales seres espirituales, cuando se consideran benévolos, generalmente se llaman ángeles, y los que se consideran malévolos se denominan demonios.

 

En otras tradiciones, tales seres intermedios son menos categóricos, ya que pueden ser benevolentes en algunas circunstancias y malévolos en otras.